Las organizaciones que trabajamos por
la solidaridad conel Pueblo Saharaui, tanto en los campamentos de
población refugiada en Tinduf (Argelia) como en los territorios
ilegalmente ocupados por Marruecos, mediante programas de cooperación y
ayuda humanitaria o sensibilización, rechazamos la decisión unilateral
del Ministerio de Exteriores de repatriar de forma urgente a los y las
cooperantes presentes en los campamentos.
Las razones aducidas de falta de
seguridad ante un supuesto riesgo inminente de ataque terrorista no
concuerdan con el análisis de las autoridades argelinas y saharauis ni
de personas expertas en seguridad de la zona.
Las medidas adoptadas tras el secuestro
de nuestras compañeras Ainhoa y Rosella y de nuestro compañero Enric,
hoy felizmente liberados, medidas tomadas en colaboración con los
gobiernos español y argelino, hacen que el trabajo en los campamentos
sea más seguro que nunca. En cualquier caso, las organizaciones y
cooperantes que trabajan en los campamentos no asumen más riesgos que en
otros lugares del mundo, donde la sociedad civil intenta paliar el
fracaso del injusto orden mundial actual.