jueves, 31 de mayo de 2018

Pª.Comunes, 3-Junio: Acción artística y poética para hablar de Honduras

ACCIÓN ARTÍSTICA Y POÉTICA PARA HABLAR DE HONDURAS

Homenaje a la vida de Berta Cáceres

Con la participación de dos notables referentes culturales de Honduras: la cantante KARLA LARA (autora de El río, en homenaje a Berta:  www.youtube.com/watch?v=pxTO_9gq5G4) y la poeta feminista MELISSA CARDOZA (http://insaut.blogspot.com/p/melissa-cardoza.html).

Domingo 3-Junio a las 17,30 hs. en Plaza de los Comunes (Pza.Peñuelas, 3. Madrid).
¡Honduras Resiste! #FueraJOH

Convocan: Plataforma de Solidaridad con Honduras, Comunidad Hondureña en Madrid y Anticapitalistas-Madrid.



lunes, 28 de mayo de 2018

1968 y el movimiento anticolonial. Las esperanzas frustradas de la Tricontinental

Para el título de esta conferencia (se trata de una conferencia dictada en la Sorbona de París, ndr), había la alternativa entre “esperanzas frustradas” y “esperanzas decepcionadas”. A fin de cuentas, “esperanzas frustradas” es más fuerte ya que incluye, sub-entendida, la noción de desposesión, lo que me parece que es el caso cuando se habla de herencias de la Tricontinental de las que han sido privados los pueblos de África, de Asia y de América Latina.

Bachir Ben Barka. En Contretemps. Traducción: Viento Sur

La Conferencia Tricontinental aportó sus esperanzas para exigir vivir en la libertad y la dignidad, para romper el corsé del colonialismo y de la explotación reaccionaria y neocolonial.

Es necesario situar la realización de la reunión de La Habana, en enero de 1966, en su contexto histórico y geopolítico. Sin llegar hasta el Congreso de los Pueblos de Oriente en Bakú en 1920 o a la Liga contra la Opresión Colonial y el Imperialismo de Bruselas en 1927, la filiación más directa en el proceso de la lucha anticolonial y anti-imperialista de los pueblos es sin duda la Conferencia de Bandung, que tuvo lugar en Indonesia en 1955. Ella fue un acontecimiento capital en la toma de conciencia de los pueblos de África y de Asia de la necesidad de organizarse, de hacer oír sus voces en la escena internacional y de apoyar sus luchas de independencia nacional.

La aportación principal de la Conferencia de Bandung fue la de afirmar el derecho de los pueblos a la liberación de la dominación colonial y al desarrollo, sin llegar sin embargo hasta el cuestionamiento de las estructuras arcaicas y anti-igualitarias en las que iban a dejarles las potencias coloniales. Planteará igualmente las bases del movimiento de los “no alineados”, nueva forma política del Tercer Mundo en el mundo bipolar de la guerra fría, entre países capitalistas industriales y países socialistas industriales.

miércoles, 16 de mayo de 2018

Mayo 68, voces y revueltas de la esperanza

Cincuenta años después del mítico mayo ¿es útil repensarlo? Sin duda, pues interpretar el pasado en el presente ayuda a construir el futuro. 

Manuel Garí y Jaime Pastor, coautores del libro 1968. El mundo pudo cambiar de base. En Público

La memoria es un espacio de lucha política (Kristin Ross), por ello no es casual que De Gaulle planteara en junio de 1968 olvidar de inmediato la “pesadilla” de las recientes jornadas de huelga general y barricadas y, mucho más tarde, de forma obsesiva personajes como Benedicto XVI, Nicolás Sarkozy o la misma Esperanza Aguirre sigan combatiendo contra el fantasma del 68 al que, cínicamente, atribuyen ser fuente de relativismo intelectual y moral.

Realmente lo que preocupa a estos personajes al servicio del orden neoliberal es el carácter de acontecimiento global que expresó el “gran rechazo” -como lo calificó en su momento, entre otros, Marcuse- al orden establecido, poniendo “brutalmente a la lucha de clases en primer plano” en palabras de Daniel Bensaïd uno de los impulsores del Movimiento 22 de marzo en la Universidad de Nanterre. Rechazo al orden global que se había ido instaurando desde finales de la Segunda Guerra Mundial, volviendo a poner en el centro del debate la posibilidad de “cambiar el mundo” y “transformar la vida”.

Fue precisamente el temor al retorno de un imaginario revolucionario el que llevó a las clases dominantes a desplegar una estrategia de “contrarrevolución preventiva”, iniciada con el golpe militar de Pinochet en Chile en septiembre de 1973.