Tocoa, Colón (Honduras).- “Este año ha iniciado muy sangriento en el Aguán, cada fin de semana asesinan a dos o tres campesinos, hace tres fines de semana asesinaron a Santos, en el sector de La Confianza, el mismo sábado antepasado murió José Trejo [1], hermano del abogado Antonio Trejo y este fin de semana secuestraron y ejecutaron a dos campesinos, que el sábado fueron encontrados asesinados con señales de tortura y quemaduras”, lamentó este martes el dirigente del Movimiento Unificado Campesino del Aguán MUCA, Yony Rivas.
Los campesinos que desaparecieron el pasado el jueves 21, después de realizar trabajo de campo en el asentamiento campesino Lempira, que pertenece al MUCA. Sus cuerpos fueron encontrados este domingo en la finca de palma africana de la cooperativa Colinas, en la aldea de Zamora de Tocoa, carretera que conduce a Sabá, Colón.
Se trata de Yoni Adolfo Cruz Padilla (25) miembro de la empresa Asociativa Campesina la Lempira del Movimiento Unificado Campesino del Aguán MUCA y Manuel Ezequiel Guillen García (19) quien formaba parte del Movimiento Campesino Recuperación del Aguan (MOCRA), ambos fueron encontrados en estado de putrefacción con características de haber sido torturados. “Ambos fueron encontrados atados de manos y ejecutados con armas de fuego, en las orillas de finca La Concepción”, indicó el MUCA.
“La cacería ha aumentado”
"Desde el mes de enero de este año son 11 los campesinos asesinados, la cacería ha aumentado, necesitamos de la presencia de más organizaciones, el objetivo es desarticular el movimiento", indicó el MUCA, en un comunicado.
“Hemos visto la persecución y la cacería, como nos llevan a un límite donde nos están acorralando y nos están llevando a las armas, los machetes, porque ellos andan con un AK-47, con guardaespaldas, guardias y con la Policía y el Ejército armado, que se han convertido en un cuerpo élite para matar campesinos”, expresó Rivas, coordinador del MUCA.
La zona del Valle del Aguán permanece militarizada [2] desde finales del año 2009, pero “creemos que esa o operación XATRUCH III, al mando del coronel Germán Antonio Alfaro Escalante, es un fracaso, porque vemos hasta el más alto nivel de la Fiscalía la confabulación de ciertos grupos de poder, con la Policía Nacional y el Ejército”.
Más de noventa campesinos asesinados
En los últimos tres años más de 90 campesinos han sido asesinados en la lucha por la defensa del acceso a la tierra, la mayoría de ellos permanecen impunes.
Por su parte, el Centro de Prevención Tratamiento y Rehabilitación de Victimas de la Tortura y sus Familiares CPTRT, expresó su solidaridad con los familiares de las víctimas, con las viudas y sus huérfanos y demandó que se investigue la muerte de decenas de campesinos en la zona y que los responsables sean llevados ante la justicia.
El gobierno de Honduras y los campesinos firmaron el 17 abril de 2010 un convenio que permitía a unas 3,000 familias del Bajo Aguán acceder a dos hectáreas de tierra cada una, para destinarlas al cultivo de palma africana, granos básicos y otros productos.
Asimismo, se acordó la venta de tres mil hectáreas cultivadas con palma africana, mismas que el gobierno compraría al empresario Miguel Facussé a un costo aproximado de mil millones de lempiras. Posteriormente, en junio de 2011, los empresarios agroindustriales, campesinos y gobierno, pactaron otra compra de más de cuatro mil hectáreas de tierra valorada en 636 millones de lempiras.
El Congreso de Honduras aprobó en agosto pasado una iniciativa para prohibir la portación de armas en la zona del conflicto agrario, donde se realizan constantes patrullajes combinados entre la Policía y el Ejército. Sin embargo, los secuestros y asesinatos están a la orden del día.
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